Oración: El Señor es mi Pastor, Nada Me Falta.
Oh Señor, mi buen Pastor,
Hoy nos reunimos en tu presencia con corazones llenos de gratitud y confianza.
Recordamos las palabras del Salmo 23 que nos aseguran que Tú eres nuestro Pastor y nada nos faltará.
Tú, que nos guías junto a aguas tranquilas y restauras nuestras almas, te agradecemos por tu cuidado constante.
En momentos de incertidumbre y tribulación, encontramos consuelo en tu liderazgo amoroso.
Tú nos llevas por sendas de justicia y verdad, mostrándonos el camino hacia la vida abundante.
Oh Señor, en los valles oscuros de la vida, donde las sombras del temor y la duda acechan, te pedimos que estés con nosotros.
Tu vara y tu cayado nos infunden valor y nos protegen de todo mal.
Sabemos que en tu presencia, ningún enemigo puede prevalecer.
Nos preparas una mesa en medio de nuestros adversarios y unge nuestra cabeza con aceite, derramando bendiciones sobre nosotros.
Nuestra copa rebosa de tu gracia y misericordia, y sabemos que tu bondad y amor nos seguirán todos los días de nuestra vida.
Confiamos en tu promesa de habitar en tu casa por siempre, oh Señor.
En momentos de alegría y en tiempos de prueba, encontramos refugio en ti, nuestro buen Pastor.
En ti hallamos paz, esperanza y plenitud.
Hoy, oramos por tu guía continua en nuestras vidas.
Que siempre reconozcamos que Tú eres nuestro Pastor y que, en Ti, nada nos falta.
Inspíranos a seguir tus caminos, a amar y servir a los demás como Tú nos has amado y servido.
En el nombre de Jesucristo, quien es el Camino, la Verdad y la Vida, oramos. Amén.
Que esta oración sea un recordatorio constante de que el Señor es tu Pastor y nada te falta.