Oración de Bendición Eterna para Quienes Hacen esta Oración.
Dios amado, Padre celestial, nos acercamos a Ti con humildes corazones llenos de gratitud y devoción.
Sabemos que eres la fuente de toda bendición y amor, y confiamos en tu infinita misericordia.
Hoy te elevamos nuestras oraciones y deseamos ser contados entre aquellos que están bendecidos por siempre.
Señor, reconocemos que tu amor es eterno y que tu misericordia no tiene fin.
En tu Palabra, nos has prometido que aquellos que ponen su fe y confianza en Ti serán bendecidos y cuidados por siempre.
Con profunda gratitud, nos aferramos a esta promesa.
Te pedimos que extiendas tus bendiciones sobre todos aquellos que hacen esta oración en busca de tu gracia y protección continua.
Derrama tus bendiciones sobre nosotros y nuestras familias.
Cuidándonos en todos los aspectos de la vida, en cada paso del camino.
Te pedimos que bendigas nuestras vidas con amor, salud, paz y prosperidad.
Que nuestras relaciones estén llenas de armonía y entendimiento.
Que nuestras metas y aspiraciones sean guiadas por tu sabiduría divina y que podamos alcanzar todo aquello que Tú has diseñado para nosotros.
Dios misericordioso, oramos por aquellos que están pasando por momentos difíciles y necesitan tu ayuda.
Te pedimos que les muestres tu gracia y compasión, y los bendigas con la fuerza para superar los desafíos que enfrentan.
Reconocemos que tu bendición no se limita a lo material, sino que abarca el crecimiento espiritual.
Te pedimos que nos ayudes a crecer en la fe, la esperanza y el amor.
Que podamos ser una fuente de luz y bendición para quienes nos rodean.
Que todos los que hacen esta oración sean bendecidos por siempre con una profunda conciencia de tu presencia amorosa en sus vidas.
Que puedan experimentar la alegría de caminar a tu lado en cada momento y encontrar consuelo en tu amor incondicional.
Te agradecemos, Señor, por las bendiciones pasadas, presentes y futuras que has derramado sobre nosotros.
En nombre de tu Hijo, Jesucristo, oramos.
Que esta oración te llene de esperanza y seguridad en la bendición eterna de Dios.
Gracias por orar conmigo.