Oración Señor Mío y Dios Mío Acudo a Ti como Amigo y Hermano

Oración Señor Mío y Dios Mío Acudo a Ti como Amigo y Hermano

Oración Señor Mío y Dios Mío Acudo a Ti como Amigo y Hermano

Oración Señor Mío y Dios Mío
Con Jesús.

Mi Dios, acudo a Ti como amigo y hermano, para que me llenes de tu alegría y tu gozo, para que renueves esa fuerza esperanzadora que levanta del suelo a todos quienes confiados en Ti buscamos ayuda.

Quiero sentir tu amor y tu perdón, quiero sentir que me tomas de la mano y me das de palmaditas en la espalda.

Puedo escucharte ya diciéndome al oído:

“¡Ánimo!, tú puedes, te he capacitado para que lo logres”.
Gracias Señor porque en Ti me siento protegido y amado.

Me ayudas cada día ser mejor ser humano.

Te ofrezco este ayuno de hoy por mi propia conversión y espero que con él, pueda fortalecerme en todas mis actitudes. Te amo y en Ti confío.

Padre amado, Tú me has hablado y me sigues hablando hoy en todos los momentos de mi vida, en toda manifestación sencilla de gestos humildes de las personas que me acompañan y los actos de caridad que cada día puedo apreciar.

Muchos son los ruidos del mundo que quieren apartar mis oídos y mi corazón a tu voz y a tus milagros.

Te pido que me ayudes con tu gracia a saber reconocer tu luz en las circunstancias y situaciones que vaya viviendo.

Quiero experimentar tu amor que sana todo los sentidos, ese amor que borra las heridas de mis faltas y da fuerza para vencer toda tentación que quiera apartarme de tu lado.

Quiero sentir hoy, a través de tu perdón, que transfiguras mi alma y corazón, que me haces resplandecer de alegría y me haces sentir amado.

Te abro mi corazón, deseo estar contigo en la intimidad de la oración, quiero dejarme transformar por tu poderosa presencia, y convertirme en un luchador incansable que busca contigo llenar los caminos de esa paz que sólo Tú puedes dar, de esa calma que tranquiliza todas las angustias y me hace vivir de forma saludable y segura bajo tu protección y amparo. Amén.

Propósito:

Visitaré y dialogaré con Jesús unos 15 minutos frente al Sagrario, adorándolo y agradeciéndole por todo el amor concedido

Reflexionemos juntos esta frase:

“Donde haya odio y oscuridad, pongamos un poco de amor y de esperanza, para darle un rostro más humano a la sociedad”.

Enviado por: Oscar Alejandro Tamez Bazan.