Oración a Dios para pedir paz y tranquilidad en días difíciles.
Señor, es tiempo de encontrarme contigo y alisto mi corazón para esta visita.
Ya tengo la puerta abierta para que Tu presencia me inunde y disipe la angustia y el temor.
Entra en mi corazón y lléname de paz, mi alma esta lista para escuchar Tu palabra y que sea ella la que me haga sentir llena de Tu amor.
Que la melodía infinita y constante de Tu gracia esté presente siempre en mi vida para mover mi corazón con las notas del pentagrama que Tu has escrito especialmente para mi.
Quiero sentir alegría porque Tu eres mi compañero y porque Tu providencia nunca me falta.
Te pido que mis hijos y yo bailemos siempre con la música universal del amor, de Tu amor, que alivia y cicatriza cualquier pena y dolor y hace renacer las flores fragantes y multicolores de la esperanza, la confianza y la fe en Ti.
Señor, esta noche te pido por el descanso eterno del alma de los seres queridos, ponles música en su espíritu y se entreguen confiados en los brazos del Hacedor del Universo.
Tu voluntad es perfecta y yo la acepto, Quédate conmigo, Hoy te necesito más que nunca, Te amo.
Señor, permite que vea esa estrella en el cielo que anuncia Tu presencia y me deje guiar por ella.
Crea en mí un corazón dispuesto a salir a Tu encuentro.
Déjame aprender del silencio de María, y de la admirable obediencia de José.
No dejes Señor que me levante sin haberte adorado.
Acepta este corazón que quiere entregarse a Ti y que necesita que nazcas en él y lo transformes.
Oh Padre celestial, en estos días difíciles, elevo mi voz hacia Ti con humildad y sinceridad.
En medio de las tormentas que agitan mi corazón y mi mente, te pido que derrames sobre mí tu paz y tranquilidad.
En momentos de incertidumbre y angustia, sé que Tú eres mi roca, mi refugio seguro.
Te ruego que infundas en mi alma esa calma serena que solo Tú puedes brindar.
Que tu presencia reconfortante envuelva mi ser y disipe cualquier temor que pueda perturbar mi paz interior.
Señor, en estos días de turbulencia y ansiedad, te pido que me concedas la gracia de mantener la calma en medio de la tormenta.
Que tu paz que sobrepasa todo entendimiento llene mi corazón y me dé la fortaleza para enfrentar cualquier desafío que se presente en mi camino.
Te pido, Dios misericordioso, que me ayudes a encontrar la serenidad en medio del caos, la esperanza en medio de la oscuridad y la fe en medio de la duda.
Permíteme descansar en tu amor incondicional, confiando plenamente en que estás obrando en mi vida de maneras que aún no comprendo.
Concede, Señor, que mi mente esté libre de preocupaciones excesivas y que mis pensamientos estén centrados en tu amor y tu poder sanador.
Ayúdame a confiar en tu plan perfecto para mí, sabiendo que todo lo que permites en mi vida es para mi bien y tu gloria.
Te pido que me des la gracia de perdonar a aquellos que me han herido y que me ayudes a dejar ir cualquier resentimiento o amargura que pueda albergar en mi corazón.
Que tu amor divino fluya a través de mí, sanando las heridas del pasado y permitiéndome avanzar con libertad y paz.
Señor, te agradezco por escuchar esta oración y por estar siempre presente en mi vida, incluso en los momentos más oscuros.
Confío en tu bondad y en tu fidelidad, y sé que en tus manos encontraré la paz y la tranquilidad que tanto anhelo.
Padre Celestial, En este momento de dificultad y tribulación, acudo a ti con un corazón afligido y lleno de incertidumbre.
Te presento mis preocupaciones y temores, buscando en tu infinito amor el consuelo y la paz que tanto necesito.
Reconozco mi fragilidad ante tu grandeza.
Soy consciente de que mis fuerzas son limitadas y que no puedo enfrentar solo las pruebas que se me presentan.
Por eso, te pido que me concedas la fortaleza necesaria para superar este momento difícil.
Ilumina mi mente con tu sabiduría.
Ayúdame a discernir tu voluntad en medio de la confusión y a tomar decisiones correctas que me conduzcan hacia la paz y la tranquilidad.
Sana mi corazón herido.
Llena mi alma de tu amor y dame la esperanza necesaria para seguir adelante, a pesar de las dificultades.
No permitas que la oscuridad me envuelva.
Que tu luz ilumine mi camino y me guíe hacia un lugar de paz y seguridad.
Protege a mis seres queridos.
Cuida de su salud física y espiritual, y llénalos de tu amor y consuelo.
Te presento también las necesidades del mundo.
Que cesen las guerras y los conflictos, que se extinga la violencia y el odio, y que florezca la concordia entre las naciones.
Que reine la justicia y la igualdad para todos los seres humanos.
Confiamos en tu infinita misericordia y en tu poder para obrar en nuestras vidas.
Gracias por tu amor y por tu protección.
En el nombre de Jesús, nuestro Señor, te presento esta oración. Amén.
Recuerda que Dios siempre está dispuesto a escucharte y a ayudarte.
No importa si tus necesidades son grandes o pequeñas, Él siempre está presente para protegerte y bendecirte.
Te deseo una vida llena de paz, tranquilidad y bendiciones divinas.
Que la luz de Dios te guíe siempre por el camino correcto y que su amor te llene de fortaleza y esperanza.
Enviado por: Carolina Herrera. (México).